El reto del 2026: consolidar el segundo piso de la transformación
Sonora Power Por Demian Duarte
El año 2025 ha sido, hasta ahora, uno de retos extraordinarios y de acciones relevantes; un periodo en el que se pusieron a prueba los basamentos de ese edificio imaginario que es la Cuarta Transformación.
Lo interesante es que, además de resistir movimientos bruscos en el entorno, esos cimientos permitieron crecer, ofrecer resultados y seguir adelante con la construcción del edificio.
Datos contundentes, como la salida de la pobreza de millones de personas, la continuidad de políticas favorables a la clase trabajadora y, finalmente, el avance en el objetivo de ampliar el mercado interno, resultan altamente significativos.
El reto se planteó desde enero pasado: sobrellevar e incluso tener la capacidad de acordar con Donald Trump; además, salir al paso de las estrategias de sembrar verdades a medias y mentiras completas por parte de los grupos y medios de la oposición en México. Todo eso se logró.
La presidenta Claudia Sheinbaum se ha consolidado en el poder como el relevo que impulsa la transformación del país, y hay que decirlo con claridad: lo ha conseguido y, además, lo ha hecho muy bien.
El expresidente Andrés Manuel López Obrador señalaba que su sucesora sería aún mejor en el ejercicio del gobierno, y creo que tenía razón en todos los sentidos.
El gobierno que encabeza Sheinbaum puede definirse en una palabra: eficaz.
Por eso la estrategia de seguridad ha dado resultados relevantes; por eso el Plan México opera y funciona; por eso el país capta inversiones en niveles récord; por eso las exportaciones crecen y el empleo alcanza cifras sin precedentes.
Desde luego que hay retos, en especial persistir en la estrategia para sacar a más mexicanos de la pobreza, terminar de enderezar el sistema de salud, mejorar la cantidad y calidad de los empleos y abatir los altos niveles de informalidad laboral que aún persisten en el país.
Llamó la atención, por ejemplo, el intento —una vez más fallido— de plantarle cara al régimen de la 4T, ahora poniendo por delante a la supuesta “Generación Z”. La estrategia fracasó porque ni el mensaje era el correcto ni el grupo poblacional al que pretendieron encabezar estaba dispuesto a cargar con los altos costos de una oposición violenta.
También resulta evidente la algarabía con la que la derecha celebra los triunfos de sus similares en algunas naciones de Sudamérica, donde la izquierda ha fallado por no ser capaz de sostener su oferta ni sus propuestas. En México, aunque les cueste reconocerlo, el gobierno de la 4T ha sabido corresponder a su base electoral, y ese es el secreto de su éxito en las urnas.
Mientras persista esa alianza con el pueblo, será muy complicado que la oposición logre construir una estrategia política con posibilidades reales de éxito a nivel nacional.
Por ello, considero que el gran reto del año 2026 es consolidar el camino, purificar al movimiento y dejar atrás las incongruencias.
Reproducir en el poder aquello que tanto se criticó a quienes lo ejercieron antes puede tener, a la larga, un alto costo, y eso la presidenta Sheinbaum lo sabe bien.
Con estas líneas y esta reflexión cerramos en #SonoraPower el ciclo del año 2025, al menos en lo periodístico, aunque permaneceremos atentos a los acontecimientos de estas semanas que transcurrirán en un ambiente de descanso.
El autor de esta columna retomará el paso en la primera semana de enero.
Mientras tanto, les deseo a todas y todos muy felices fiestas y un inicio de año 2026 en todo lo alto.
¡Salud por el año que viene! 🍾✨
Síguenos en Redes
Más Recientes
Domo de Cristal
No hay comentarios